Un corazón que ama sin destino
es como un barco que navega
a la deriva. Así este corazón
te lleva ramos de mi piel
arrancada en arrecifes
y late solo en el mar
sin encontrar nunca tu orilla.
Mauricio.
PD: -¡Barco hundido!-
Te amo te amo te amo
(late que late)
pero no leas estás palabras
sin antes saber
que son solo burbujas
en una caverna donde mi corazón
comenzó un maremoto.
M. Escribano
Katia Chausheva
.
Tu corazón conoce ese único embarcadero
ResponderEliminarA veces pasa que el embarcadero tiene temor del mar y sus mareas, o sencillamente que su mar no vuelva
Beso