Tendremos que omitir
esta sed torrencial de seguir enamorados.
Ya las estrellas se amontonan.
Todo el cielo se apoya
en la distancia de tus ojos
y hay un fuego al sur del horizonte
donde jamás llegaremos.
Nos hemos dormido en el culto al amor
y el amor despertó en otro lado.
Mauricio Escribano
Imagen Katia Chausheva
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario